Durante toda mi trayectoria profesional he trabajado con temas de aseguradoras llevando asuntos que me encargaban. En muchas ocasiones se trataba de actuar en defensa de sus asegurados que solicitaban al propietario del piso que se les había ocasionado los daños o bien una indemnización o una reparación de todos los desperfectos que habían sufrido. Se han incrementado los casos en los son los propios asegurados los que tienen que contratar un profesional de la abogacía.
Se trata sobre todo de personas que se encuentran indefensas al no logran tener una buena comunicación o un buen interlocutor con su propia aseguradora. En esto casos es cuando se toma conciencia de la importancia que hay que dar a contratar un seguro con una aseguradora que tenga delegaciones abiertas en nuestra ciudad ya sea de manera directa o a través de una correduría de seguros. Ya que el problema viene cuando se sufre algún daño ya sea ocasionado por un tercero o por alguna instalación de nuestra propia vivienda.
En estos casos para ser atendidos con garantía vamos a agradecer la presencia física de un interlocutor que nos aconseje y sepa dar los pasos adecuados para que o bien nos reparen o nos indemnicen los perjuicios sufridos.
La advertencia que quiero realizar es que, contratar con una aseguradora online puede suponer una ventaja en cuanto al precio y en cuanto a la comodidad de gestionarlo desde nuestra casa. Sin embargo, en caso de tener algún problema vamos a padecer los inconvenientes de la mala comunicación y falta de información que lamentablemente demuestran.